Me acompañan en esta travesía

sábado, 8 de mayo de 2010

La música invade la calle

Hoy he paseado al son de instrumentos afinados, y he compartido el júbilo de la gente sencilla, unidas por idéntico espíritu. Las calles estaban llenas de sonrisas, bellas palabras y buenos deseos. Todos generosos en aplausos frente a músicos que nos regalan su trabajo. Las palomas han elevado el vuelo, anunciando el inicio del concierto. Los escenarios callejeros salpicaban la ciudad y la gente alternaban entre unos y otros, sin querer perderse una nota. El sol ha presidido su palco desde temprano y ha sumado calor al acto.

Ha sido un deleite para los sentidos y la emoción a flor de piel al son de trompetas.

2 comentarios:

Alís dijo...

Qué gozada! Son esos regalos para el alma que a veces recibimos...

Besitos

Perséfone dijo...

Son magníficos regalos que luego debo pagar en cama, pero soy feliz mientras los disfruto.

Besitos

Te regalo un sueño, tú decides cuál